Día 19 - Z

Seré breve en este escrito complementario al día 18, vale la pena soñar, conversar, decir las cosas como son y expresar los sentimientos reprimidos. Es otra forma de crecer, de dejar de lado las apariencias confesando ya que en el cielo hay nudos que se empiezan a deshacer.

Hoy fui clara, directa y fría, hubo algún que otro mundo rondando mi cabeza generando un eclipse de ideas que rebotaron en celos absurdos e infantiles. Ali, ¿tú, celosa? Señorita invierno, ¿celosa? ¡Sí! Celosa, yo, celosa y sintiendo algo que hacía años no experimentaba por miedo, por seguir un patrón de inseguridad camuflada de madurez. Sí, todos tenemos momentos de celos por algo o alguien, hoy mis sentimientos se desnudaron y me vi al espejo, esta era yo, la Aldine dormida que por fin salió al exterior.

Para rematar, leí una frase que sentenció mi día: "Lo que más deseas es lo que más temes". Diantres, todo este tiempo estaba frente a mi y yo intentando negar lo evidente. Hay que trabajar desde adentro si quiero reinventarme en todo el sentido de la palabra. El camino continua.

-Ali

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